Un toldo en el jardín es un lujo maravilloso. Prolonga tu temporada al aire libre, te protege del sol y la lluvia y crea una transición suave entre el interior y el exterior. Ya tengas una veranda moderna, un cobertizo de madera o una acogedora terraza cubierta: con el estilo adecuado, puedes convertir este lugar en un espacio exterior atractivo y confortable. En este blog, te damos consejos para decorar y dar estilo a tu porche.
Antes de empezar a decorar, conviene pensar en cómo quieres utilizar el espacio. ¿Queréis principalmente relajaros, comer juntos o trabajar al aire libre? Al fin y al cabo, la función determina la distribución, qué muebles necesitas y cómo vas a amueblar la habitación.
1. El mobiliario adecuado
Una vez determinada la función de tu espacio, es hora de empezar a elegir los muebles adecuados. Si quieres utilizar la habitación principalmente como zona de estar, entonces, por supuesto, elegirás un bonito conjunto de salón con sillas cómodas, un sofá de salón, cuadros escoceses y una iluminación suave. Para una zona de comedor, es mejor elegir una mesa espaciosa y buenas sillas. Una mesa grande con una silla cómoda también es importante si piensas utilizar la habitación como lugar de trabajo. Si quieres que la habitación sea multifuncional, elige muebles flexibles, como una mesa plegable o sillas plegables. Así podrás adaptar fácilmente el espacio al uso que quieras darle.
2. Apuesta por la comodidad y el ambiente
Un dosel sólo es realmente acogedor si se siente como tal. Los materiales suaves, la iluminación cálida y los accesorios personales marcan la diferencia. Los materiales también son muy importantes. Los materiales cálidos y naturales suelen ser los que más favorecen el ambiente. Por ejemplo, elige muebles de jardín de madera y mantas cálidas de lana.
Puedes aportar un ambiente cálido y acogedor a la habitación con una cadena de luces, una estufa de leña o algunas velas. Utiliza accesorios que se adapten a tu estilo y piensa también en las plantas. Por ejemplo, elige plantas en macetas grandes o plantas colgantes. Éstas dan algo de vida al espacio y conectan el dosel con el resto del jardín.
3. Ten en cuenta la estación
Un toldo bien equipado puede utilizarse en todas las estaciones. En verano, puedes disfrutar de la sombra, mientras que en invierno proporciona un lugar resguardado para sentarse en el jardín. Así que piensa también en algunas cosas prácticas, como un espacio para guardar cojines o plaids y protección contra el viento y el frío, como una pantalla lateral o paredes de cristal. Si quieres poner plantas bajo tu toldo, lo mejor es elegir plantas en maceta. En invierno, de este modo, podrás llevarlas fácilmente al interior si hiela mucho y también podrás moverlas sin tener que dar la vuelta a todo el toldo. ¡Práctico para cuando quieras cambiar de aires!